Se trata de un nuevo sistema para la esterilización de conservas que no requiere agua en los procesos de calentamiento y enfriamiento ni empleo de combustibles fósiles, y reduce de forma significativa el consumo de energía para lograr la esterilización, lo que supone un considerable ahorro energético y la reducción de emisiones de CO2.
El proyecto NOVAEST desarrollará un prototipo que será validado a escala industrial en el proceso de producción de productos alimenticios enlatados. Su objetivo es poner en el mercado de la industria de alimentos una nueva tecnología de esterilización. Se espera que después de la finalización del proyecto la penetración en el mercado español será del 3%, seguido de la entrada en el mercado europeo.
Se conseguiría así una importante reducción del impacto ambiental del sector agroalimentario. En concreto, se estima que se lograría reducir en 3.600.000 litros/año el consumo de agua y en 349 toneladas/año las emisiones de CO2, además de un ahorro de 31 millones de kWh/año en consumo de energía.
Estos procesos permiten además una mejora en las características organolépticas de los alimentos en conserva. Así, las empresas que opten por la nueva solución verán incrementada su competitividad gracias al aumento de calidad del producto y a los beneficios ambientales del nuevo sistema.
El proyecto NOVAEST está coordinado por la empresa Riberebro Integral y en él participan las Gvtarra y Eurochamp, IK4-Ikerlan y los Centros CTIC-CITA (CTIC, Centro Tecnológico de la Industria Cárnica de La Rioja, y CITA, Centro de Innovación y Tecnología Alimentaria de La Rioja).
Su presupuesto global alcanza los 1.346.558 euros y ha obtenido financiación de los fondos europeos FEDER, a través del Programa Estatal de I+D+i Orientada a los Retos de la Sociedad (Retos-Colaboración), en su convocatoria de 2015. El objetivo temático del Programa Operativo al que pertenece es el de “Promover el desarrollo tecnológico, la innovación y una investigación de calidad”.
