El año pasado, un grupo de empleados de United Airlines demandó a la aerolínea para bloquear su mandato de vacunación contra el COVID-19, que imponía licencias sin goce de sueldo a los trabajadores que permanecían no vacunados, incluidos los que recibieron exenciones religiosas y médicas.
El mandato fue confirmado en un fallo de diciembre por el Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito en Nueva Orleans.
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Ahora los empleados tienen otra oportunidad improbable.
Un tribunal federal de apelaciones le ha dicho al juez de Texas en la demanda original que debe reconsiderar su decisión, según el Chicago Tribune.
El tribunal federal de apelaciones dictaminó lo contrario de la decisión original, diciendo la semana pasada que los trabajadores con licencia sin goce de sueldo en realidad están “siendo coaccionados activamente para violar sus convicciones religiosas”, lo que constituye un daño irreparable.
Dos de los tres jueces de la corte federal de apelaciones escribieron que “United ha presentado a los demandantes dos opciones: violar sus convicciones religiosas o perder todos los salarios y beneficios indefinidamente. Esa es una elección imposible para los demandantes que quieren permanecer fieles pero deben poner comida en la mesa”.
Sin embargo, el juez disidente Jerry Smith escribió que el fallo “tuerce el registro para que se ajuste a esa invención. No debemos apresurarnos a impedir que las empresas privadas protejan a sus empleados y clientes durante una pandemia”.
United, con sede en Chicago, proporcionó una declaración al Tribune.
“No hay duda de que nuestro requisito de vacunación ha salvado vidas y ha mantenido a nuestros empleados fuera del hospital”, dijo la compañía. “Y está claro que la mejor manera de mantenerse a salvo es que todos se vacunen, como han decidido hacer casi todos los empleados de United”.
