MÉXICO. D.F. – El Grupo Aeroméxico obtuvo un resultado neto de 1.080 millones de pesos mexicanos (59,2 millones de euros) en el ejercicio de 2013, un 18,3% menos que en el mismo periodo del año anterior cuando ganó 1.323 millones de pesos (72,6 millones de euros), según ha informado la empresa en un comunicado.
La cifra de facturación de la compañía entre enero y diciembre aumentó un 1,6%, hasta los 39.850 millones de pesos mexicanos (2.186,9 millones de euros), en comparación con los 39.228 millones de pesos mexicanos (2.152,7 millones de euros) que alcanzó en 2012.
A esta caída de los resultados contribuyó el aumento del 1,3% en los costes operativos, al pasar de 31.859 millones de pesos (1.748 millones de euros) a 32.277 millones de pesos (1.771 millones de euros), aunque se redujo un 1,2% el consumo de combustible.
En este mismo periodo, la aerolínea registró un resultado bruto de explotación antes de amortizaciones y alquileres (Ebitdar) de 7.573 millones de pesos (415,6 millones de euros), un 2,8% más que en 2012, cuando alcanzó 7.369 millones de pesos (404 millones de euros).
Asimismo, el resultado neto de explotación antes de impuestos (Ebitda) se situó en 3.958 millones de pesos (217 millones de euros), un 7,6% más que en el mismo periodo del año anterior cuando registró 3.679 millones de pesos (201,9 millones de euros).
CAE UN 37% EN EL CUARTO TRIMESTRE.
En el cuarto trimestre de 2013, la aerolínea registró un resultado neto de 385 millones de pesos mexicanos (21 millones de euros), un 37,2% menos que en el mismo periodo del pasado año, cuando consiguió 612 millones de pesos (33,5 millones de euros)
Entre octubre y diciembre la compañía aérea facturó 10.708 millones de pesos (587,8 millones de pesos), un 8,7% más que en el mismo periodo del año anterior cuando ingresó 9.851 millones de pesos (540,8 millones de euros).
El director general del grupo, Andrés Conesa, ha destacado «los buenos resultados» de este periodo, frente a los desafíos del entorno económico que han caracterizado el ejercicio de 2013. Asimismo, subrayó la mejora de la rentabilidad de la aerolínea, logrando «por cuarto trimestre consecutivo reducciones en los costes por unidad de producción».
En este periodo además, la compañía incorporó cuatro aviones (dos Boeing 787-8, un Boeing 767 y un Embraer 190) más a su flota y retiró tres Embraer 145, con lo que la compañía cuenta con 117 aviones.
