Santo Domingo. El embajador de los Estados Unidos en la República Dominicana ha deplorado que el Ministerio de Turismo cierre la posibilidad de abrir su oferta turística a la comunidad de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (LGTB) de su país, cuyos gastos ascienden a US$1,400 millones.
James -Wally- Brewster afirmó que parecería que a la República Dominicana sólo le interesan algunos tipos de turistas, a juzgar por los comentarios que supuestamente emitiera el ministro Francisco Javier García, en el sentido de que el país no está interesado en explotar el potencial de dicho mercado.
“Cuando el funcionario que es la cabeza, el jefe del Gobierno dominicano, dice que no desea a un cierto grupo de personas nos coloca a nosotros en una situación difícil para respaldar la actividad turística en este país”, dijo el funcionario norteamericano durante una entrevista concedida al periódico El Caribe.
En ese sentido, afirmó que para revertir esta situación es necesario que el país envíe el mensaje de que no discrimina y abre sus puertas a todos por igual. “Ese es un mensaje importante, porque obviamente las personas quieren ir donde sepan que no van a ser discriminadas. Una persona cuando se va de vacaciones tiene la posibilidad de decidir dónde invertir su dinero. Y no es solamente los 1,400 millones de dólares que gasta la comunidad LGTB, sino también todas sus amistades que la acompañan y que no van a ir a un lugar donde no son bienvenidas”.
Al hilo del tema, el jefe de la misión diplomática, quien estuvo acompañado de su esposo, Bob Satawake, el Consejero para Asuntos Públicos, James Russo, y el Agregado de Prensa, Jeremiah Knight, destacó que aunque en algún momento se ha sentido discriminado por su orientación sexual, la acogida y calidez con que lo ha recibido el pueblo dominicano ha sido extraordinaria.
“Eso se ve siempre. No tenemos que seguir insistiendo sobre las declaraciones que algunas personas han hecho, pero habiendo dicho eso, yo no creo que esas personas realmente hablen a nombre del pueblo dominicano, porque nuestra experiencia ha sido extraordinaria. Donde quiera que vamos la gente nos saluda cálidamente. A veces, las personas hasta se excusan por declaraciones que han sido hechas por otros”, manifestó.
Afirmó que vinieron a República Dominicana por voluntad propia, a un lugar donde han vacacionado por más de quince años. “Sabíamos que los pocos que se refieren en términos negativos acerca de cualquier grupo o en términos peyorativos no representan la mayoría. Y esperamos que siga así. Esperamos que esas personas con el tiempo ya no insistan con esto”, agregó.
Retos para el turismo
Brewster afirmó que pese a la belleza de las playas dominicanas, la calidez de su gente y la construcción de nuevos complejos turísticos, siguen existiendo otros retos por superar como el relativo a la seguridad y al manejo del inglés y otros idiomas por parte del personal de servicio de los hoteles, áreas que considera deben ser fortalecidas.
No obstante, destacó la incursión de la línea de cruceros Carnival, que se prepara para traer a la provincia de Puerto Plata unos 250 mil turistas, inicialmente, con la expectativa de aumentar a medio millón.
Manifestó que es crucial que la primera impresión que se lleven los turistas cuando visiten Puerto Plata sea extraordinaria, por lo que insistió en la necesidad de que se mejoren las condiciones de la carretera que comunica esa provincia norteña con Santiago, que por el mal estado representa un riesgo para sus usuarios.
Añadió que otro aspecto importante es crear las oportunidades para que los visitantes no sólo disfruten de sus hermosas playas, sino también de sus montañas, cascadas, museos y su producción agrícola.
La República Dominicana es el principal destino turístico de la región del Caribe, con más de 5 millones de turistas y aportes a la economía por más de 5 mil millones de dólares, según el último informe del Banco Central. Pero el ministro de Turismo, Francisco Javier García, ha afirmado que es un turismo de familia y no se discrimina a nadie.
