Pestana se ha fijado como objetivo incrementar su oferta en Latinoamérica para estar presente en cinco años en las principales capitales de la región, según ha adelantado el responsable de su área de Desarrollo, José Roquette. La cadena lusa ya se ha implantado en Brasil, Argentina, Colombia, Venezuela y Uruguay hasta sumar 14 establecimientos.
Su expansión en el Cono Sur se dirige ahora a Perú y Chile, “privilegiando las capitales, por tanto Lima y Santiago”. De hecho en Lima tenían un proyecto en ciernes que “lamentablemente no se llegó a concretar, pero es cuestión de tiempo”.
Mención aparte merece México, un país que, en palabras de Roquette, “requiere de un business plan propio porque allí están posicionadas las mejores cadenas del mundo, no sólo las españolas sino también las estadounidenses”.
En cuanto a su presencia en Uruguay, es el resultado de una joint venture con un empresario local con el que ha reabierto el antiguo Jockey Club de Montevideo, en el centro histórico, que “todavía no tiene fecha de apertura como hotel; de momento vamos a empezar sólo como restaurante aunque el siguiente paso será comenzar a operar el alojamiento, pero no antes de un año y medio o dos años”.
Futuros destinos de desarrollo
Pestana ha centrado en Europa y Sudamérica sus focos de expansión, pero también ha incorporado tres hoteles en el último año fuera de ambas regiones que, según indica Roquette, “podrían marcar las futuras posibilidades de desarrollo del Grupo”.
Así, ya cuenta con su primer establecimiento en Estados Unidos, en Miami, de 100 habitaciones y en régimen de propiedad (ver ‘Pestana entra en Estados Unidos con un hotel en Miami’, ha entrado en Marruecos con un hotel en Casablanca de 80 habitaciones en alquiler, su primer paso en el norte de África; y dispone de un alojamiento en gestión en Cuba, concretamente en Cayo Coco, con 508 habitaciones (‘Pestana abre su primer hotel en Cuba‘).
El Grupo ha cerrado 2013 con un Ebitda de 100 millones de euros, 1.000 millones de euros en activos y un 40% de deuda, lo que, como concluye Roquette, “denota la estabilidad y firmeza de esta empresa, con una base de activos muy fuerte y una deuda que en cuatro años podría ser cubierta”.
Roquette también ha anunciado que Pestana se hará con un inmueble en el centro de Madrid para convertirlo en un 4 estrellas, y quePousadas está dispuesta a entrar en la gestión de Paradores aunque de forma minoritaria.